Resulta interesante la propuesta que planteó el Presidente de todos los argentinos, Mauricio Macri, siendo que resulta inconcebible pretender que la corrupción la resuelva exclusivamente el gobierno sin la participación de cada uno de los argentinos que formamos el pueblo.
Debemos revisarnos personalmente, me incluyo, para ver todo lo que puedo aportar con mi cambio personal, hasta en las cosas más insignificantes, que enlodan en mayor o menor medida el rostro puro de nuestro país tan hermoso y tan joven.
Tenemos un motivo muy fuerte para hacer esto, la propuesta y decisión del Presidente, que ya está dando el ejemplo, marca una nueva esperanza que genera una enorme fuerza para un cambio personal y social.
¿Te podes imaginar la belleza de un país sin corrupción? Sin contar todavía lo económico y las otras cosas necesarias, tan solo logrando eso Argentina ya se convertiría en una potencia mundial reverenciada por todos los países que lo integran. Esto hace más fácil lo económico y las otras cosas necesarias, resuelve rápidamente el problema de inseguridad porque con ella se logra la paz.
El problema de Argentina no es básicamente económico ni educativo ni de salud, sino moral.
Si resolvemos el problema moral, en muy poco tiempo solucionaríamos los problemas de desconfianzas, rivalidades egoístas, violencias, que generan los grandes problemas sociales en el campo de la economía, educación, salud, pobreza, inseguridad.
Tengo una enorme confianza en este nuevo gobierno, y debo comprometerme con él para lograr el éxito en sus propuestas.
Este compromiso es diferente, no se trata de pegar carteles del partido ni de conseguir más votos.
Se trata de ser cada día más honestos y vivir en la verdad.
Juan C. Starchevich
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