Posible engaño en las urnas

    ¿Hubo sinceridad en las PASO? Esta es la gran pregunta que los políticos deberían resolver.

    Durante tantos años los políticos han mentido y mienten al pueblo en decir una cosa y luego hacer otra, es posible que esa farsa, como semilla sembrada al voleo en todo el país, haya comenzado a germinar e incluso dar fruto en muchos casos. Significa que hoy el pueblo podría devolver la falsedad a la clase política prometiéndoles una elección y luego hacer algo diferente. Es una actitud muy inteligente, generadora de una gran estampida tal como el incendio de un bosque saca corriendo a todos los animales en cualquier dirección.

    Es impresionante el gran desarreglo y reordenamiento desordenado e irracional que amontona candidatos en sectores calientes e incómodos para ellos que los mantiene corriendo constantemente de aquí para allá exhibiendo su personalidad en todos sus perfiles ante la mirada de los votantes que, como nuevos ganaderos, revisan e inspeccionan las reses, caballos y burros, para luego ponerles sus marcas.

    Todos los votantes calcularán su primera opción para luego tomar una decisión final en las elecciones definitivas de octubre. ¿Quién domina la jugada?, ¿los candidatos políticos o el pueblo votante? Veremos si acaso se corona a alguien, igual o diferente a las primarias o a ninguno.

Riesgo latente

    ¿Habrá un Congreso Nacional Constituyente, en un futuro próximo, con el fin de designar un Presidente transitorio que llame nuevamente a elecciones como en el tiempo del 2001? Es muy complicado, esto ya ha ocurrido y no funcionó porque han vuelto los mismos, como casta indestructible y empeorada y, como una gran maldición, seguirán estando siempre hasta que se mueran de viejos.

    ¿Qué hay que hacer entonces? ¿Dejar que entre los animales se maten entre sí y que sobreviva el más fuerte?, ¿o tal vez que se enamoren entre ellos, se asocien y formen un solo rebaño, de tal modo que, gane quien gane, estén todos juntos independientemente del voto individual? En este caso el rebaño sería más grande, pues se sumaría una tercera tropa. De nada sirve la mentira en el voto, los candidatos siempre ganarán al pueblo.

Para pensar

    ¿De quién es la culpa de nuestro mal, de los políticos o del pueblo? El pueblo quiere un gobernante que resuelva sus problemas individuales. Un gobierno no está para eso, cada uno tiene el deber y la responsabilidad de arreglar sus propios asuntos, aunque necesitamos un gobierno que sepa administrar bien lo que genera el pueblo. ¿Es esto una ideología? No, pero es posible que alguna de ellas haya tomado esta idea como propia. Tenemos también la ideología de la comodidad ociosa, donde se pretende que el gobierno haga todo por uno tan solo por existir. ¿Quién va a hacer esto? ¿Gratis? Encontramos la ideología del pueblo argentino. Por eso estamos como estamos. El pobre seguirá siendo pobre, el rico se empobrece y los políticos se harán ricos. Es totalmente natural.

    No existe algún tonto que vele por ti solucionando tus problemas y enriqueciéndote, conformándose solamente con su sueldo de Presidente ¡Vaya ingenuidad! ¡Resultaron ladrones! ¿Qué esperabas?

    Un pueblo responsable, trabajador y honrado, seguramente tendría un excelente gobierno. Algo les falta hacer a ellos, pero, mucho nos falta hacer a nosotros.

Guerra miserable

    En realidad todas las guerras son miserables, sean mundiales o civiles, aunque aquí me refiero a la miseria económica, miseria social, miseria cultural; causantes de escaramuzas de la época medieval, saqueos a comercios, a viviendas, a ciudadanos por los mismos ciudadanos; alocados, atontados, liberando la mayor monstruosidad que reside en su interior al notar que no existe control que los detenga pudiendo hacer lo que quisieran.

    Se robarían el pan entre ellos matándose sin piedad. Esta es la guerra miserable a la cual hago referencia porque el escenario ya está listo para que esto ocurra, de hecho ya está ocurriendo mostrando como pequeños focos de incendio que aparentan ser controlables sin darse cuenta que el combustible ha sido rociado abundantemente en todas partes. El hambre, la ignorancia, dependencia política, fanatismo…, son ese inflamable que llevará al pueblo hasta el límite del canibalismo.

Conclusión

    Sería muy difícil que pueda asumir un nuevo gobierno elegido, diferente al actual, luego de las elecciones de octubre y, si llegara a posesionarse le resultará extremadamente espinoso, por no decir imposible, gobernar, puesto que no es ni siquiera imaginable una democracia en el caos con delincuentes organizados y desorganizados al acecho, que desde algún mando se libera.

    Lo siento si mi opinión no es optimista, ni alegre, ni graciosa, es que no podemos taparnos los ojos ni enterrar la cabeza bajo tierra negando una realidad que, por descuido, distracción e irresponsabilidad social, ha tomado por sorpresa, siendo que desde hace tiempo esto se veía en su desarrollo. Por ejemplo en la escuela, los docentes y sus gremios lo sabían, lo veían crecer y acompañaron su crecimiento; ahora la educación está destruida, gracias a la inacción de los docentes, sus gremios y las familias de los alumnos. Todo lo demás que se ha arruinado: la investigación científica, la idea de patrimonio artístico, nuestras relaciones humanas, la moral, la cultura del trabajo, entre otras, ¡se podía! haber evitado. Esto nos hace responsables a todos, al vivir encerrados en nuestro propio egoísmo.

    No merecemos un buen gobierno, somos dignos de nuestra propia desgracia.

Juan C. Starchevich

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